Qué esperar en los primeros 30 dias

July 31, 2018,

Rebecca Haresign

Muy bien, has decidido adoptar un estilo de vida saludable, cambiar tus hábitos alimenticios y ponerte en movimiento. Puede parecer fácil a primera vista, pero la realidad es que la mayoría de las personas necesita darle tiempo a su cuerpo para que se adapte gradualmente a estos cambios saludables.

A continuación te contamos algunos de los problemas más comunes que tiene la gente cuando realiza cambios importantes en sus hábitos alimenticios y de estilo de vida, así como varios consejos para afrontarlos.

Controlar el apetito

Es normal sentir hambre cuando reduces tu ingesta total de calorías. No obstante, ten cuidado de no reducir demasiado tu ingesta de calorías en los primeros 30 días. Aunque recomendamos utilizar nuestras Guías del plan como punto de partida, cada uno es diferente y algunas personas necesitan empezar el plan consumiendo aperitivos con un mayor contenido calórico o con mayor frecuencia que otras. Mucha gente cree que no está realizando una reducción de calorías tan drástica, y la sensación de hambre le puede resultar chocante.

Normalmente, las personas con sobrepeso han estado recibiendo más calorías (energía) de las que su cuerpo necesitaba durante un periodo de tiempo prolongado. Cambiar al Plan de pérdida de peso de Isagenix puede significar una importante disminución de la ingesta de calorías; para algunas personas, implica una reducción de hasta un 50 % en las calorías diarias. ¡No es de extrañar que pueda sentirse hambre! Para perder entre 0,5 y 1 kg a la semana, tendrás que comer 500-600 calorías menos al día, así que la sensación de hambre dependerá de cómo era tu dieta antes de empezar a utilizar los productos y planes de Isagenix.

Mantener el nivel de energía

Al igual que el hambre, la falta de energía suele deberse a cambios drásticos o repentinos en la ingesta de calorías. También es normal sentirse bajo de energía si no se eligen alimentos de alto valor nutricional para tomarlos junto a los productos de Isagenix. Si combinas un aumento repentino de la actividad física con una fuerte reducción de calorías, la sensación de baja energía puede intensificarse.

Para evitar sentirse sin fuerzas o agotado, es mejor reducir gradualmente la ingesta de calorías y aumentar lentamente la actividad física que hacer varios cambios repentinos de una tacada. Aunque llevar una dieta y un estilo de vida más saludables debería resultar con el tiempo en un nivel de energía más elevado, la mayoría de las personas necesita darle tiempo a su cuerpo para adaptarse gradualmente a los cambios.

Evitar dolores de cabeza ocasionales

Los dolores de cabeza no son infrecuentes cuando se hace un cambio de dieta y pueden tener diversas causas: desde haber reducido la cantidad de carbohidratos consumidos hasta olvidar mantenerse bien hidratado. Añadir unos snacks extra cuando comienzas tu Plan para perder peso en 30 días puede ayudar a tu cuerpo a adaptarse gradualmente a los nutrientes aportados por tu dieta y reducir los síntomas no deseados.

Te recomendamos que comiences despacio: reduce progresivamente tu ingesta de calorías en los Días del batido y espera hasta que seas capaz de completarlos fácilmente antes de intentar un Día de depuración*. Puedes empezar con una «mini-depuración» más corta de 12-16 horas, o añadir snacks extra en tus primeros Días de depuración* para que la transición sea suave. Adoptando una estrategia gradual, irás aumentando tu confianza y podrás encontrar la rutina del Día de depuración* que mejor te vaya.

Si además empiezas simultáneamente un nuevo programa de ejercicio, no te olvides de incluir suficientes bebidas para reemplazar el líquido y las sales perdidos con el sudor. Una bebida deportiva que contenga electrolitos, como AMPEDTM Hydrate, te ayudará a mantenerte hidratado. La pequeña cantidad de carbohidratos de esta bebida te puede ayudar a mantener estable tu nivel de azúcar en sangre durante todo el ejercicio, lo que puede contribuir a mantener a raya los dolores de cabeza.

Adaptarse a los cambios digestivos

Cuando se introducen cambios importantes en la dieta, es normal experimentar cambios en la digestión. Afortunadamente, hay algunas medidas que puedes tomar para facilitar la adaptación de tu cuerpo a tu nuevo estilo de vida saludable.

Cuando se pasa a una dieta sana, normalmente se aumenta la cantidad de fibra y de alimentos ricos en nutrientes. Incrementar la ingesta de fibra demasiado rápido es a menudo la razón por la que muchas personas experimentan problemas digestivos al cambiar de dieta; por ello, intenta incrementarla por etapas e incluir varias fuentes de fibra distintas.

Asegúrate también de que bebes suficiente agua. Mantenerse hidratado es especialmente importante para las personas que sufren de estreñimiento; si el cuerpo está deshidratado, también lo estará el tracto digestivo. El agua ayuda a mantener una digestión fluida, y si no hay suficiente agua, la digestión puede detenerse y provocar molestias. Para garantizar que el tracto digestivo recibe los fluidos que necesita, intenta beber al menos 2-2,5 litros de agua a lo largo del día.

Cambiar suavemente

Tu viaje hacia la salud debería ser una experiencia agradable. Aunque algunas personas experimentan ligeras molestias cuando empiezan a cambiar su estilo de vida, el malestar ha de verse siempre como una señal para ralentizar el proceso. Quizá estés haciendo demasiados cambios con demasiada rapidez y a tu cuerpo le cuesta adaptarse. Como siempre, te recomendamos que consultes a tu médico antes de hacer cambios importantes en tu dieta o si te preocupan los síntomas que estás experimentando. Con una preparación adecuada, sabiendo qué puede suceder y cómo lidiar con ello, tienes más posibilidades de realizar con éxito tu transición a un estilo de vida saludable.

* Un Día de depuración es un ayuno con apoyo nutricional que alimenta y revitaliza los propios sistemas de desintoxicación del cuerpo. Para obtener más información sobre los Días de depuración, visita Isagenix.com.

Referencia

Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria. Scientific opinion on dietary reference values for water. EFSA J 2011;8:1459-1506

Share This Story, Choose Your Platform!